6 de mayo de 2012

Noto/Sakamoto: Minimalismo para las masas




Que una propuesta de electrónica experimental tenga una fecha en el Gran Rex es una linda noticia. Aficionados y chusmas (estoy entre los segundos) de la música contemporánea, habituados a los espacios marginales, no podríamos, creo, ver sino con simpatía la presentación de Alva Noto y Ryuichi Sakamoto en un espacio de 3 mil y pico de localidades.

Sakamoto es un músico inspirado y versátil. Su fama mundial ­debe mucho a los premios obtenidos por su música para películas (la de El último emperador se llevó un Oscar y se afincó en más de un hogar junto a otras innombrables) y a que, cuando quiere, es un melodista pertinaz. Parte de su producción tiene una accesibilidad infrecuente para alguien de su formación y sus intereses, al punto de que muchos de sus discos van a parar ese cambalache de música funcional con ambiciones trascendentales llamado new age. Pero el pianista japonés es mucho más que un honorable compositor de bandas sonoras hogareñas.

Desde hace ya diez años colabora con Alva Noto, un fino un artista sonoro y visual alemán. Mientras Sakamoto dispara notas con su piano, Noto procesa esos sonidos o los interfiere con una paleta de recursos electrónicos como microruidos, sonidos oscilantes, sampleos o percusiones minimalistas fabricadas con todo ello.

En Summvs (2011) exhiben un nivel de compenetración notable. Hay un Noto quizás menos radical, sutilmente deslizado hacia los parajes impresionistas de Sakamoto. Pero persiste la intuición de que el carácter del disco es marcado por los escenarios diseñados por el primero. A ese proceso de consustanciación remite el título, contracción de los términos latinos summa y versus.

Habrá que dejar los auriculares a un lado y verlos en vivo. ¡Minimalismo para las masas y good show!